viernes, 1 de febrero de 2008

El imbécil del mes nº 5: Tomás Delgado

En enero no hubo Imbécil del Mes, pero en febrero Mondo Zombie os trae un especimen que bien vale por dos: el gran Tomás Delgado Bartolomé. También podría haber inaugurado la nueva sección: El Despreciable Bastardo del Mes o quizás El Maldito Engendro del Demonio o simplemente El Malvado del Mes (entendiendo el Mal como la total ausencia de empatía hacia el ser humano).



El Mal, exponiendo sus razones

El asunto es de sobra conocido, pero Mondo Zombie hace un resumen para nuestros lectores de Sri-Lanka: allá por el 2004 el bueno de Tomás circulaba a velocidad excesiva (aunque no se pudo demostrar) con su flamante Audi A8 por una carretera de La Rioja cuando atropelló a Enaitz Uriondo, que pedaleaba con su bicicleta sin casco ni luces de señalización, y, al parecer, se saltó un Stop. El chaval, de 17 años, murió en el accidente. Los abogados de ambas partes llegaron a un acuerdo económico y el caso se cerró, pero en 2006 Tomás, sabiamente aconsejado por su abogado, decide interponer una demanda a la familia de Enaitz por los daños causados por el cuerpo del chaval en la carrocería de su estupendo Audi A8, por un total de 20.000 €, ¿no es enternecedor? La familia es citada al juzgado para revivir una vez más el horror de la pérdida de su hijo, pero antes pone en conocimiento de los medios la demanda de Tomás. Tomás saca pecho y cuelga un video en internet dando sus razones monetarias (el seguro no quiso pagarle los arañazos y abolladuras del Audi) y personales (se tomó un cubata después del accidente porque estaba nervioso, y por eso dió positivo en el análisis posterior). Automáticamente media España desea untar con brea, emplumar y ahogar en un charco de estiercol a Tomás. Tomás, con el arrojo que le caracteriza, se hace un ovillo y se esconde debajo del somier, no se presenta en el juzgado y retira la demanda, aunque según su abogado "su honor ha sido mancillado" (sic). Por su parte, la familia, hasta los belfos del impresentable, decide interponer una demanda (por vía penal esta vez) contra Tomás para que se revise el caso del atropello y el propio atestado del accidente, para demostrar que:

- A) Tomás estaba borracho en el momento del impacto

- B) Circulaba a más de 160km/h por una vía secundaria, unos 70 km/h más de lo permitido

con la noble intención de que, con la nueva legislación vial en la mano, este especímen pase algún tiempo a la sombra. Por el momento el juez ya ha obligado a Tomás a pagar la costas del procedimiento judicial. Mondo Zombie propone a su propio bouffette de abogados, para que Tomás conozca en sus carnes el verdadero significado de la expresión "ser mancillado".


El bouffette, listo para hacer justicia

Y para la familia de Enaitz, simplemente, un gran abrazo.

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